Robótica para rehabilitación de ictus a distancia
En Europa hay más de 6 millones de personas que conviven con los efectos de un ictus (ataque cerebro vascular) y se espera que aumente en un 33% hasta el 2035 [1]
La rehabilitación tras un ictus tiene una característica muy relevante, y es que si el paciente la sigue de forma continuada y adecuada, las posibilidades de recuperación son muy elevadas. Un gran porcentaje de personas afectadas por un ataque cerebro vascular ven afectada la movilidad de los miembros superiores (brazos y manos) o inferiores (problemas para caminar de nuevo). Los ejercicios de rehabilitación que llevan a cabo no tienen una gran complicación, sin embargo hay dos condicionantes que disminuyen en gran medida la eficacia de la rehabilitación. La primera es el coste económico de cada sesión de rehabilitación (directo o asociado al transporte hasta el centro de rehabilitación). Por otro lado está la falta de indicadores objetivos que permitan al terapeuta evaluar la progresión del paciente.
ictus
Para paliar esta situación el programa EIT-Health (financiado por el H2020) está impulsando iniciativas que permitan llevar a cabo una rehabilitación del paciente en su propio hogar. Para ello se combinan plataformas robóticas (como puede ser un brazo robotizado que permite realizar ejercicios de rehabilitación motora) con sistemas que permiten a los profesionales personalizar el plan de ejercicios del paciente y obtener medidas e indicadores objetivos y cuantitativos de la evolución del paciente.
La inclusión del terapeuta en el bucle y la interacción remota con el paciente es fundamental ya que todas las iniciativas que se centran únicamente en la parte robótica fallan por dos razones simples: son incapaces de involucrar al paciente en su recuperación y sobre todo de motivarlos.
Esta combinación de tecnologías de monitorización remota y robótica asistencias tiene posibilidades reales de implantación, ya que más allá del beneficio para el paciente, suponen un ahorro de costes importante para cualquier centro de rehabilitación, ya que permitirá a un solo clínico controlar a múltiples pacientes de forma simultánea.
Un ejemplo de este tipo de tecnologías lo encontramos en el proyecto europeo SwitHome. Este proyecto utiliza la plataforma de medicina no presencial antari Home Care para ayudar a la rehabilitación de personas que, tras un ictus, ven afectada su movilidad. SwitHome permite que los pacientes puedan llevar la rehabilitación a cabo en su hogar bajo la supervisión de un especialista.
SwitHome es una herramienta basada en plantillas para pies para auto-rehabilitación desde casa, con seguimiento remoto del terapeuta. Es una rehabilitación conveniente para pacientes, un 35% menos costosa para el centro de rehabilitación, y proporciona biofeedback para una mejor atención.
Para saber más sobre SwitHome y otros proyectos impulsados por el EIT-Health, visita esta página: https://www.eithealth.eu/innovation_projects